Historia del plato

Las costillas de cerdo a la miel y mostaza son una receta que surge de la fusión de sabores europeos y estadounidenses. Mientras que la miel aporta un dulzor tradicional de la cocina casera y mediterránea, la mostaza remite a platos de parrilla típicos de Europa del Este y Norteamérica.

En Argentina y otros países de Latinoamérica, estas costillas se popularizaron gracias a la influencia de la cocina americana y las reuniones familiares al aire libre. Hoy, son un plato emblemático que combina textura jugosa, sabor intenso y un glaseado dorado que encanta a todos.

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Ingredientes (para 4 personas)

• 1 kg de costillas de cerdo

• 4 cucharadas de miel

• 3 cucharadas de mostaza (preferentemente Dijon)

• 2 dientes de ajo picados

• 2 cucharadas de salsa de soja (opcional)

• Sal y pimienta a gusto

• Aceite de oliva

Preparación paso a paso

1. Preparar las costillas: Salpimentar las costillas por ambos lados y dorarlas en una sartén con un poco de aceite de oliva para sellar los jugos.

2. Preparar la salsa: Mezclar en un bol la miel, la mostaza, el ajo picado y la salsa de soja. Ajustar el sabor con sal y pimienta.

3. Hornear o cocinar a la parrilla:

   • Horno: Precalentar a 180 °C (350 °F), colocar las costillas en una bandeja y pincelar con la salsa. Hornear 25-30 minutos, pintando cada 10 minutos con más salsa hasta que queden doradas y caramelizadas.

   • Parrilla: Colocar sobre brasas indirectas, pincelar varias veces con la salsa y cocinar lentamente hasta que estén tiernas y doradas.

4. Reposar y servir: Dejar reposar 5 minutos antes de cortar y servir. Se puede acompañar con ensalada fresca, puré de papas, papas fritas o vegetales asados.

Las costillas de cerdo a la miel y mostaza combinan lo mejor de dos mundos: el dulzor natural de la miel y el ligero picante de la mostaza. Un plato sencillo, elegante y perfecto para cualquier ocasión especial.