EL RECOPILADOR
24 de octubre de 2024
¿Sabías que la primera huelga de la historia ocurrió en el antiguo Egipto?
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Halladas a la vuelta de una esquina.
La primera huelga de trabajadores de la que tengamos registros ocurrió en Egipto en el año 1152 a.C. Ocurrida durante el reinado del faraón Ramsés III, es un relato fascinante que marca un hito significativo en la lucha por los derechos laborales y la justicia social. Este evento, registrado en el llamado Papiro de la Huelga, conservado en el Museo Egipcio de Turín, revela un momento crucial en el que los trabajadores se alzaron contra las injusticias y las condiciones precarias en las que estaban siendo obligados a trabajar.
“¡Tenemos hambre!”
El contexto de esta huelga se sitúa a mediados del siglo XII a. C., durante el reinado de Ramsés III, quien enfrentaba dificultades económicas y políticas debido a las secuelas de las guerras contra los libios y los Pueblos del Mar, así como a la presión del poderoso clero de Amón y las conspiraciones internas. En este escenario tenso, los trabajadores de Deir el-Medina, un poblado de artesanos y obreros encargados de la construcción de tumbas en el Valle de los Reyes, decidieron tomar medidas drásticas ante el retraso en el pago de sus salarios y la falta de provisiones básicas.
Debemos saber que Las Pirámides de Egipto
no fueron construidas por esclavos.
La huelga fue liderada por unos sesenta artesanos, incluyendo picapedreros, carpinteros y dibujantes. Su demanda principal era el salario alimenticio que les debían, así como la provisión de ropa y otros suministros esenciales para su supervivencia. Estas demandas quedaron registradas en el Papiro de la Huelga, donde los trabajadores expresaron su desesperación por el hambre y la falta de recursos básicos para subsistir:
“Año 29, segundo mes de la Inundación, día 10. Hoy el escuadrón de trabajo traspasó los muros de la necrópolis [el puesto de control] gritando: “¡Tenemos hambre!”. Van dieciocho días de este mes que [los hombres] se sientan detrás del templo funerario de Tutmosis III [...] Si hemos llegado a este punto es por culpa del hambre y la sed; no hay ropa, no hay ungüentos, no hay pescado, no hay verduras… Escribe al faraón nuestro perfecto señor, toma nota de nuestras palabras y escribe al visir, nuestro superior, porque necesitamos nuestras provisiones”.
Manifestaciones y bloqueos
El conflicto se prolongó durante varios días, con los trabajadores llevando a cabo manifestaciones y sentadas en lugares clave como el templo mortuorio de Ramsés III y el templo de Tutmosis III. Los funcionarios del gobierno, desconcertados por la situación y temerosos de las repercusiones, intentaron calmar a los huelguistas ofreciéndoles alimentos, pero estas medidas no fueron suficientes para resolver el problema de fondo.
La huelga tomó un giro aún más radical cuando los trabajadores decidieron bloquear el acceso al Valle de los Reyes, impidiendo así el acceso de sacerdotes y familiares a las tumbas reales con las ofrendas tradicionales.
Esta acción desafiante no solo evidenció la determinación de los trabajadores, sino también su comprensión del valor simbólico y religioso de su protesta.
La situación se complicó aún más cuando el Jefe del cuerpo de seguridad, algo así como la policía local del antiguo Egipto, de nombre Montumes, fue incapaz de contener a los huelguistas, lo que llevó a un estancamiento en las negociaciones.
Sin embargo, después de intensas conversaciones entre los trabajadores y los funcionarios del gobierno, se llegó a un acuerdo temporal y los salarios atrasados fueron finalmente pagados. A pesar de esta aparente resolución, las tensiones subyacentes persistieron y los trabajadores continuaron luchando por mejores condiciones laborales.
Un ejemplo obrero de hace más de 3000 años.
El impacto de esta huelga no se limitó al ámbito local, sino que resonó en toda la sociedad egipcia de la época. Los trabajadores de Deir el-Medina, que eran considerados entre los mejor pagados y más respetados del país, se convirtieron en símbolos de resistencia y valentía. Su lucha inspiró a otros grupos dentro y fuera de Egipto a demandar sus derechos y desafiar la opresión.
La importancia de esta huelga radica en su papel pionero en la historia de la lucha obrera y los movimientos sociales. Por primera vez, los trabajadores se organizaron colectivamente para exigir mejores condiciones de trabajo y justicia económica. Aunque el resultado exacto de la huelga sigue siendo incierto, su legado perdura como un recordatorio poderoso de la capacidad del pueblo para resistir la opresión y buscar un cambio significativo en la sociedad. En un momento en que el mundo enfrenta desafíos similares en términos de desigualdad y explotación laboral, la historia de la primera huelga documentada en la historia ofrece lecciones valiosas sobre la importancia de la solidaridad, la determinación y la lucha por la justicia.
Fuente: https://www.muyinteresante.com/historia/63581.html#:~
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