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Halladas a la vuelta de una esquina.

A quién no le hubiese encantado estar a bordo de ese tren, ese 4 de octubre de 1883!!

Ese día, el Orient Express inaugura su primer viaje oficial, de París a Estambul.

El 4 de octubre de 1883, a las 19.30 horas, el tren más fascinante del mundo partió de París hacia Constantinopla.

El Orient Express se inició con cuarenta pasajeros a bordo, para un viaje de ida y vuelta que duró siete días. 

Con este viaje, la geografía de Europa dio un vuelco: la noción de viajes de larga distancia quedó completamente redefinida.

El tren viajó a lo largo de Europa continental y Asia occidental, con estaciones terminales en París, Londres, Atenas y Estambul. 

Todas las rutas originales del Orient Express finalmente se retiraron en 2009, después de casi cien años de los viajes en tren más famosos del mundo.

En una época en la que viajar todavía era difícil y peligroso, el Orient Express era un escaparate de lujo y comodidad.

Los viajes se volvieron cada vez más lujosos y exclusivos.

Cualquiera que fuera alguien, hizo un viaje a bordo del Orient Express para vivir la experiencia, conocer a las personas a bordo y regresar a casa con historias que contar.

El Orient Express mostró a los viajeros el esplendor de su decoración: marquetería de madera preciosa, paneles de vidrio, telas lujosas, cuero refinado y las importantes almohadas y ropa de cama de lujo que garantizaban un buen descanso nocturno. 

Sin olvidar una visita al restaurante para vivir una experiencia gastronómica increíble...

El Orient Express tenía un comedor que rivalizaba con cualquier gran hotel  ¡Y un menú a la altura! El menú de la cena inaugural del 4 de octubre de 1883, incluía ostras, rodaballo con salsa verde, pollo chasseur, un chaud-froid de animales de caza (carne cubierta con una salsa cremosa de gelatina), budín de chocolate y un buffet de postres, porque siempre hay espacio para el postre después de una cena de cuatro platos.

Todo esto estuvo regado con los mejores vinos y champán, todo servido con el tintineo de un piano de media cola.

Cuando amaneció el 5 de octubre, los pasajeros habían pasado su primera noche a bordo.

El tren se acercaba a Estrasburgo y las fronteras del Imperio alemán.

Luego atravesó Baviera hasta Munich, donde hizo su primera breve escala.

Al día siguiente, el Orient Express cruzó la frontera hacia el Imperio Austro-Húngaro. 

A última hora de la tarde, el tren llegó a la estación central de Viena, al son de los himnos nacionales de Francia, Alemania, Austria, Hungría, Rumania, Bulgaria y Turquía.

Este era cada país por el que pasaría el tren en este viaje inaugural.

El Orient Express avanzó lentamente hacia el este durante la noche, haciendo una breve parada en Poszony, hoy conocida como Bratislava. 

A media mañana del 7 de octubre, el tren llegó a las ciudades recién fusionadas de Buda y Pest, que habían pasado a llamarse Budapest.

Después de ser recibidos por una banda militar, hubo un delicioso buffet, que incluía un gulash tradicional húngaro, servido al son de música folclórica húngara.

El Orient Express continuó su viaje inaugural hacia Szeged.

En Szeged, se invitó a una orquesta gitana a subir a bordo y actuar durante las dos horas de viaje que los llevaría a Temesvar, hoy conocida como Timisoara, en Rumania.

Luego, el Orient Express se dirigió más al este, hacia la frontera rumana y fuera de Austria-Hungría. 

Tras una breve parada en Bucarest, el Orient Express se dirigió a Giurgiu.

Los pasajeros abandonaron el tren y fueron transportados a través del Danubio hasta Ruse, en Bulgaria.
Tal aquella aventurada travesía ferroviaria, plena de lujo y confort, en el momento de su inicio hace 142 años

Una formación del Expreso de Oriente 
de alguna fecha de alrededor del año 1900.

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