Los fideos caseros tienen una larga tradición en muchas culturas culinarias del mundo, especialmente en Italia y Argentina. En Argentina, la tradición de hacer pasta en casa fue traída por inmigrantes italianos a fines del siglo XIX y principios del XX. Hacer fideos caseros es una práctica que se transmite de generación en generación, representando la conexión con las raíces familiares y el amor por la comida hecha a mano.

Ingredientes:

• 500 g de harina de trigo
• 5 huevos
• 1 cucharadita de sal
• 1 cucharada de aceite de oliva (opcional)
• Agua (si es necesario)

Preparación:

1. Preparar los ingredientes: Coloca la harina en un bol grande o sobre una superficie limpia, formando un volcán con un hueco en el centro.
2. Añadir los huevos: Rompe los huevos y colócalos en el hueco del volcán de harina. Añade la sal y el aceite de oliva si lo estás usando.
3. Mezclar: Con un tenedor, comienza a mezclar los huevos con la harina, incorporándola poco a poco hasta que la masa comience a formarse.
4. Amasar: Cuando la masa esté lo suficientemente unida, empieza a amasar con las manos. Amasa durante unos 10 minutos, o hasta que la masa esté suave y elástica. Si la masa está demasiado seca, añade un poco de agua, una cucharada a la vez.
5. Reposar: Envuelve la masa en film plástico y deja reposar durante 30 minutos a temperatura ambiente.
6. Estirar la masa: Divide la masa en porciones manejables. Con un rodillo, estira cada porción sobre una superficie enharinada hasta que esté bien delgada (alrededor de 2-3 mm de grosor).
7. Cortar los fideos: Enrolla la masa estirada en forma de cilindro y corta con un cuchillo afilado en tiras del ancho deseado para tus fideos. Desenrolla las tiras y colócalas sobre un paño limpio o una superficie enharinada para que se sequen un poco.
8. Cocinar los fideos: Lleva una olla grande con agua y sal a ebullición. Cocina los fideos caseros durante 3-5 minutos, o hasta que estén al dente. El tiempo de cocción puede variar según el grosor de los fideos.
9. Servir: Escurre los fideos y sírvelos con tu salsa favorita. Algunas opciones tradicionales son la salsa de tomate, salsa boloñesa, pesto o simplemente con aceite de oliva y ajo.

Conclusión:

Hacer fideos caseros es una experiencia gratificante que conecta con las tradiciones culinarias y familiares. Aunque requiere un poco de tiempo y esfuerzo, el resultado final es un plato delicioso y lleno de sabor, perfecto para cualquier ocasión especial. ¡Anímate a probar esta receta y disfruta del auténtico sabor de los fideos caseros