El Ministerio de Defensa ruso informó este martes del primer ataque ucraniano con misiles balísticos ATACMS de fabricación estadounidense contra una instalación militar en la región fronteriza de Briansk. Según el reporte oficial, cinco de los proyectiles fueron interceptados, mientras que los fragmentos de un sexto provocaron un incendio en el lugar.

“Como resultado, se declaró un incendio que fue operativamente extinguido. No hay muertos ni heridos”, detalló el comunicado difundido en Telegram. El ataque, llevado a cabo a las 03:25 de la madrugada, empleó misiles tácticos de largo alcance provistos recientemente a Ucrania por Estados Unidos. Las defensas antiaéreas rusas, incluyendo sistemas S-400 y Pantsir, lograron neutralizar la mayoría de los proyectiles, aseguró el Ministerio.

Por su parte, el Estado Mayor ucraniano confirmó un ataque contra un arsenal en Briansk, aunque evitó especificar el armamento utilizado. Este episodio marca la primera vez que Ucrania utiliza oficialmente los ATACMS, misiles de largo alcance que Washington autorizó en semanas recientes, según medios occidentales.

La autorización, según trascendidos, habría limitado inicialmente los objetivos a la región de Kursk, donde Ucrania mantiene tropas desde agosto y Rusia ha concentrado efectivos, incluidos miles de soldados norcoreanos según informes de inteligencia.

En este contexto, el presidente ruso, Vladímir Putin, endureció la postura nuclear del país al aprobar una doctrina que contempla el uso de armas atómicas en respuesta a ataques convencionales. La medida responde, según analistas, al creciente suministro de armamento avanzado a Ucrania por parte de Estados Unidos y sus aliados.

La escalada de tensiones entre Moscú y Kiev, combinada con las decisiones estratégicas de Washington y las nuevas disposiciones nucleares de Rusia, genera un clima de incertidumbre sobre el curso del conflicto y su impacto en la seguridad global.