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17 de noviembre de 2024

Salsa Amatriciana: La Clásica Italiana para Pastas Perfectas

Conoce su historia y aprende a preparar en casa la auténtica salsa amatriciana con panceta, tomate y queso pecorino para un plato lleno de sabor italiano.

La salsa amatriciana tiene sus raíces en el municipio de Amatrice, en la región de Lazio, Italia, y es uno de los pilares de la cocina romana. Su historia se remonta a más de 300 años y originalmente se preparaba con pocos ingredientes básicos: panceta (o guanciale), tomate y pecorino.

La receta original no incluía el tomate, ya que este ingrediente fue introducido en Italia desde América tras su llegada en el siglo XVI. La salsa amatriciana se originó como un platillo rústico en las montañas de Amatrice, donde los pastores utilizaban productos locales como la carne curada (guanciale) y el queso pecorino. La combinación de estos ingredientes resultaba en una salsa sabrosa y fácil de preparar con recursos limitados.

Con el paso de los siglos, la receta se fue popularizando, especialmente en Roma, donde se comenzó a servir con pasta, particularmente con bucatini, un tipo de pasta gruesa con un agujero en el centro. Hoy, la amatriciana es considerada uno de los platos más emblemáticos de la cocina italiana y se sirve en muchos restaurantes alrededor del mundo. La receta ha evolucionado a lo largo del tiempo, pero la base sigue siendo la combinación de guanciale, tomate y pecorino, con algunas versiones modernas que incluyen otros ingredientes como el vino blanco o el peperoncino (chile).

Ingredientes:

  • 100 g de panceta o guanciale
  • 400 g de tomate triturado
  • 1 cebolla pequeña
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • 1/4 taza de vino blanco
  • 1 cucharadita de peperoncino o aji mala palabra como se llama en Argentina (opcional)
  • 50 g de queso pecorino rallado
  • Sal y pimienta al gusto

Preparación:

  1. Cocina la panceta: En una sartén grande, calienta el aceite de oliva y fríe la panceta hasta que esté crujiente.
  2. Añade la cebolla: Incorpora la cebolla picada y sofríe hasta que esté dorada.
  3. Desglasa con vino: Vierte el vino blanco y deja reducir a la mitad.
  4. Añade el tomate: Incorpora el tomate triturado, sazona con sal, pimienta y peperoncino (si usas). Cocina a fuego lento por 15 minutos.
  5. Sirve: Mezcla con tu pasta favorita, espolvorea con pecorino rallado y disfruta.

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