Los trabajadores del subterráneo de la Ciudad de Buenos Aires, nucleados en la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSYP), denunciaron este jueves la muerte de Jorge Navarro, empleado del Taller Constitución de la Línea C, quien padecía cáncer de pulmón por exposición al asbesto, un material prohibido y cancerígeno presente en los trenes.

"Con profunda tristeza informamos que el día de ayer falleció nuestro compañero Jorge Navarro", expresó el sindicato en un comunicado, donde destacó que la Auditoría Médica ya había reconocido la relación entre su enfermedad y el asbesto en 2020. Desde 2018, cuatro trabajadores del subte han fallecido por esta causa y otros 107 han sido diagnosticados con enfermedades vinculadas al material, según datos de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo.

“Nuevamente el asbesto mata. Seguimos peleando para que se retire completamente este material del subte y Premetro y que se adquieran nuevas flotas libres de esta sustancia”, manifestaron los Metrodelegados, quienes declararon el estado de “alerta y movilización”. El comunicado firmado por Roberto Pianelli y Néstor Segovia, secretario General y Adjunto del gremio, también alertó que la problemática afecta no solo a los trabajadores, sino a los usuarios, constituyendo un problema de salud pública.

Por su parte, la empresa Emova expresó su pesar por el fallecimiento de Navarro y reafirmó que desde 2018 trabaja en un plan de desasbestización. “El subte cuenta con condiciones adecuadas de seguridad en base a estándares científicos y técnicos”, aseguraron, aunque evitaron brindar detalles por razones de confidencialidad.

Denuncias de insalubridad en la Línea B

El panorama se agrava con las recientes denuncias de Metrodelegados sobre infestaciones de sarna en la Línea B, atribuidas a la “falta de limpieza y fumigación” en trenes y estaciones. Según el gremio, la situación ya afectó a trabajadores y representa un peligro para los usuarios, sumándose a la presencia de roedores, cucarachas y alacranes en la red.

En respuesta, Emova informó que reforzó los protocolos de limpieza y desinfección y realizó un monitoreo nocturno en las formaciones y estaciones, sin hallar evidencia de plagas. “Por prevención, intensificamos las tareas habituales de higiene en todos los sectores afectados”, indicaron.

Mientras tanto, los trabajadores insisten en la necesidad de mayores inversiones en infraestructura, seguridad e higiene para garantizar condiciones dignas en el subte porteño, tanto para empleados como para los miles de usuarios que utilizan el servicio a diario.