Sabiendo de la crítica situación por la que atraviesa el colectivo de la discapacidad en su lucha por el respeto y el reconocimiento de sus derechos, es difícil evitar el enojo cuando alguien tiene por objetivo lucrar en lugar de ayudar. 

Al tomar conocimiento de la actitud de algunos desarrolladores de aplicaciones y sus fines de lucro, es que me urge reflexionar sobre el contexto actual y la perspectiva pretendida para el desarrollo de un sector de la sociedad que viene luchando para que se reconozcan sus derechos. 

Hoy las aplicaciones significan mucho para quienes la utilizan con el propósito de comunicarse. El avance tecnológico se ha pensado para facilitar el desarrollo social, situación que se ve amedrentada cuando los fines personales se disfrazan de elegante carisma.

Son muchas las posibilidades que existen para integrar e incluir derribando barreras y obstáculos que se oponen a los ajustes razonables que pocos saben comprender. Pero pocas son las personas que desinteresadamente pretenden desde lo más profundo de la razón construir un estado facilitador del respeto y la plena integración.

Un proyecto superador y creíble es un proyecto de vida, que no se termina en la redacción ni en la presentación en la mesa de entrada de ningún organismo.

El oportunismo a la hora de crear es bueno si se utiliza para coordinar el tiempo y el trabajo, las gestiones y las necesidades, pero cuando el oportunismo es direccionado al lucro pierde su esencia y tiene el efecto inverso.

Recibir del Estado una remuneración por la instalación de una aplicación que es gratuita o que puede ser suplida por otra de similares características, también gratuita, no estimula la investigación ni reconoce el trabajo de nadie, sino que amedrenta a quienes luchan por el avance de cada persona con discapacidad.

Sin rencores y con la fuerza dirigida al respeto por los derechos de las personas con discapacidad es que debe tratarse cada tema inherente a esta materia. Tal vez haya errores, pero si la convicción de que el progreso social es el eje de cada gestión se podra reivindicar los derechos de las personas con discapacidad.

Solco Iván

Coordinador General

Consejo Consultivo de Discapacidad (Sociedad Civil)