Los ñoquis (del italiano gnocchi) tienen su origen en el norte de Italia, en la región del Piamonte, donde las papas eran abundantes. A finales del siglo XIX, los inmigrantes italianos llevaron la receta a la Argentina, donde se convirtió en una verdadera tradición.

La costumbre de comer ñoquis el 29 de cada mes proviene de una leyenda: un joven médico, San Pantaleón, pidió pan a unos campesinos y, a cambio de su bondad, les anunció un año de prosperidad. Desde entonces, se asocia el plato con la buena fortuna, y muchas familias colocan un billete debajo del plato para atraer la suerte y la abundancia.

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Ingredientes (para 4 personas)

• 1 kg de papas (preferentemente blancas o arenosas)

• 1 huevo

• 200 a 250 g de harina 0000 (aproximadamente)

• Sal a gusto

• Nuez moscada (opcional)

Preparación paso a paso

1. Cocinar las papas:
   Lavar las papas y hervirlas con cáscara hasta que estén tiernas. Luego pelarlas y hacer un puré bien seco, sin grumos.

2. Preparar la masa:
   Colocar el puré sobre la mesada limpia, formar un hueco en el centro y agregar el huevo y una pizca de sal. Incorporar de a poco la harina hasta obtener una masa suave que no se pegue en las manos.

3. Formar los ñoquis:
   Dividir la masa en porciones y formar rollitos largos de unos 2 cm de grosor. Cortar trocitos de 2 cm y, si se desea, pasarlos por un tenedor o una tablita para darles la clásica forma acanalada.

4. Cocinar:
   Hervir abundante agua con sal. Echar los ñoquis y retirarlos con espumadera cuando suban a la superficie (eso indica que están listos).

5. Servir:
   Acompañar con salsa de tomate, fileto, crema, pesto o la que más te guste. Terminar con queso rallado y un chorrito de aceite de oliva.

Los ñoquis caseros son un plato simple pero lleno de historia y afecto. Cada bocado recuerda las mesas familiares, las tradiciones heredadas y el placer de cocinar con las propias manos.