En medio de un creciente conflicto laboral y en un contexto de ajuste impulsado por el gobierno de Javier Milei, renunció el director del Hospital Posadas, Ángel Daniel Elia, quien había asumido el 1 de enero de 2025. Su salida se produjo en un momento crítico: trabajadores y residentes denuncian amenazas, sanciones y una falta total de interlocución con las autoridades nacionales.

La renuncia de Elia —que alegó “motivos personales y profesionales”— dejó al hospital más importante del conurbano bonaerense sin conducción definida, en un escenario ya tenso por el incumplimiento de una promesa de bono no remunerativo de $300.000 para los residentes, que había sido anunciado como parte de un acuerdo informal.

ÚNETE A NUESTRO INSTAGRAM.

👉   https://www.instagram.com/nce.oficial

Ofrecemos lo más relevante en noticias. 

“Estamos esperando que la dirección nos diga cómo van a continuar”, señalaron trabajadores del Posadas en diálogo con El Destape. Además, advirtieron que el supuesto bono mensual ofrecido no reemplaza su principal demanda: una recomposición salarial real, que eleve los sueldos iniciales por debajo de los $800.000 para quienes trabajan entre 60 y 70 horas semanales.

El propio personal médico denunció haber recibido telegramas con advertencias de sanciones si persistían con las medidas de fuerza iniciadas esta semana y las previstas para el 10 y 11 de junio. Frente al temor por despidos —ya hubo cerca de 300 cesantías durante esta gestión—, algunos sectores resolvieron levantar temporalmente los paros, aunque sin abandonar el reclamo.

En este marco, la Asamblea de Trabajadorxs Residentes y Concurrentes de CABA convocó a un paro con movilización para el miércoles 11 de junio, en solidaridad con el Garrahan y otros hospitales nacionales en lucha.

“Repudiamos la amenaza de despidos de nuestrxs compañerxs. Los acompañamos en su lucha. Convocamos a AMM y la Federación de Profesionales a sumarse para exigir una recomposición salarial urgente”, expresaron.

Desde Nación aseguraron que ya se otorgó un bono extraordinario para todos los residentes, pero los gremios respondieron que se trata de una respuesta unilateral y bajo presión, que no resuelve el conflicto de fondo.

La salida repentina del director profundiza la crisis: los trabajadores esperan ser recibidos por las nuevas autoridades el próximo lunes. Si no hay definiciones, no descartan retomar las medidas de fuerza.