Ubicada en el departamento de Colón, a unos 40 kilómetros de la ciudad homónima, Villa Elisa se ha consolidado como uno de los destinos turísticos más encantadores de Entre Ríos. Fundada en 1890 por inmigrantes europeos, esta localidad combina su rica historia con una infraestructura moderna que invita a disfrutar de momentos de relax, aventura y conexión con la naturaleza.

El principal atractivo de Villa Elisa son sus termas, un complejo que cuenta con piscinas de aguas termales surgentes, ideales para el relax y el bienestar. Estas aguas, que brotan a más de 40°C, poseen propiedades terapéuticas que atraen tanto a turistas locales como internacionales. Además de sus piscinas cubiertas y al aire libre, el complejo termal ofrece spa, masajes y tratamientos de salud, convirtiéndolo en un lugar perfecto para una escapada rejuvenecedora.

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Más allá de sus termas, Villa Elisa invita a recorrer su Parque San Jorge, un extenso espacio verde con senderos arbolados que reflejan por qué se la conoce como la “Ciudad Jardín”. Los visitantes pueden disfrutar de caminatas, paseos en bicicleta y picnics al aire libre en este entorno tranquilo y pintoresco.

La herencia cultural de la ciudad se encuentra plasmada en el Museo Regional de Villa Elisa, que preserva objetos, fotografías y documentos que narran la llegada de los colonos suizos, italianos y franceses que fundaron la ciudad. Este espacio es ideal para quienes desean profundizar en la historia de la región y entender cómo la diversidad cultural dio forma a la identidad local.

Para los amantes del turismo rural, Villa Elisa ofrece experiencias en las estancias y chacras cercanas, donde es posible participar en actividades como la cosecha, el ordeñe y la elaboración de productos caseros. Estos circuitos rurales brindan una conexión auténtica con las tradiciones del campo entrerriano.

El calendario de la ciudad también está repleto de eventos y celebraciones. Una de las más destacadas es la Fiesta Provincial del Inmigrante, que honra las raíces europeas de Villa Elisa con danzas, música y gastronomía típica de las comunidades que dieron origen a la localidad.

La gastronomía de Villa Elisa es otro de sus grandes atractivos. Los restaurantes y parrillas locales ofrecen delicias como el asado entrerriano, empanadas, chacinados y dulces caseros elaborados con productos locales. Además, la región es conocida por sus vinos artesanales, una opción que no puede faltar en la experiencia culinaria.

Villa Elisa es un destino que combina relax, historia y naturaleza en una experiencia única. Ya sea para un fin de semana o unas vacaciones prolongadas, esta joya de Entre Ríos promete momentos inolvidables en el corazón de la provincia.