Este miércoles, universidades nacionales de todo el país se movilizan nuevamente para expresar su rechazo al ajuste presupuestario impulsado por el Gobierno de Javier Milei y al inminente veto presidencial a la ley de financiamiento universitario. La convocatoria, que incluye a docentes, no docentes, estudiantes, gremios y diversas organizaciones, tendrá como epicentro el Congreso de la Nación, en Buenos Aires, y se replicará en las principales plazas del país.

"Les pedimos que insistan en defender la educación pública garantizando los fondos para el correcto funcionamiento de las universidades", subrayó la Universidad de Buenos Aires (UBA) en un comunicado emitido el último domingo, dirigiéndose a los legisladores que podrían definir el futuro de la ley si el presidente efectivamente la veta en los próximos días.

El rechazo al ajuste también incluye la cuestión salarial. Los gremios universitarios vienen denunciando una pérdida de más del 60% del poder adquisitivo desde la asunción de Milei. María Agustina Perrotta, secretaria general de la Juventud Universitaria Peronista (JUP) de La Plata, recordó que tras la "Marcha Federal Universitaria del 23 de abril, el Gobierno tuvo que ceder y aumentar los fondos de funcionamiento", pero remarcó que "los salarios de los trabajadores quedaron postergados".

En ese sentido, la oferta del Ejecutivo, presentada la semana pasada, fue considerada insuficiente. El Gobierno propuso un aumento salarial del 5,8%, más un 1% adicional mensual, lo que fue tildado por los gremios como "una falta de respeto". Además, las declaraciones del secretario de Educación, Carlos Torrendell, quien acusó a las universidades de "inventar alumnos", generaron mayor indignación entre los manifestantes.

Una movilización federal con reclamos locales

La protesta será federal y abarcará distintas demandas según las regiones. En Fiske Menuco (General Roca), Río Negro, los estudiantes de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo) exigen mejoras en el transporte público, un reclamo que lleva tiempo sin resolverse. "El aumento de frecuencias de colectivos anunciado por el gobernador Alberto Weretilneck aminoró el problema, pero no lo resolvió de fondo", señaló Aitiana Tebes, presidenta del Centro de Estudiantes de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UNCo.

Por su parte, en Rosario, la comunidad universitaria también saldrá a las calles. La Federación Universitaria de Rosario (FUR) confirmó que se concentrarán a las 17 horas en la Plaza Montenegro y marcharán hacia el Monumento a la Bandera, donde se realizará un acto a las 18.

La unidad entre gremios y estudiantes ha sido clave para organizar esta nueva movilización. "Se dio algo histórico con la convocatoria unificada del Frente Sindical Universitario y los estudiantes", destacó Tebes, subrayando que realizaron actividades conjuntas para "mostrar esta unidad de cara a la comunidad".

Expectativa en el Congreso

El veto presidencial a la ley de financiamiento universitario es inminente, y el Congreso será el escenario donde se definirá el futuro de la norma. Los legisladores tendrán la responsabilidad de decidir si insisten con la ley o respaldan la postura del Ejecutivo. En este contexto, las universidades y sus comunidades esperan que el Congreso "defienda la educación pública" y garantice los recursos necesarios para su correcto funcionamiento.

El Gobierno, que en otras oportunidades ha respondido a las manifestaciones con un tono confrontativo, minimizó las movilizaciones a través de redes sociales. Sin embargo, el desenlace en el Congreso podría representar un golpe político importante si no logra apoyo suficiente para sostener el veto.