La salsa provenzal tiene su origen en la región de Provenza, al sureste de Francia, famosa por su cocina fresca y aromática, influenciada por el clima mediterráneo y los ingredientes locales. Este tipo de salsa es una combinación simple y deliciosa de ingredientes frescos como el ajo, el perejil y el aceite de oliva, reflejando la esencia de la cocina rústica provenzal.

Provenza, desde tiempos antiguos, ha sido una región agrícola rica en productos frescos y hierbas aromáticas, como el tomillo, el romero y el perejil. La cocina provenzal, con su fuerte influencia mediterránea, favorece platos ligeros, con sabores naturales y menos procesos de cocción. En este contexto, la salsa provenzal se popularizó como una preparación sencilla pero intensa, utilizada para realzar el sabor de carnes, pescados y vegetales.

A lo largo del tiempo, la salsa provenzal se expandió más allá de las fronteras de Francia, llegando a otros países, como Argentina, donde se adaptó y se convirtió en un acompañamiento esencial para carnes a la parrilla, en especial el famoso asado. La salsa provenzal destaca por su frescura y versatilidad, y sigue siendo una favorita en la cocina casera y profesional.

Ingredientes:

• 1/2 taza de perejil fresco picado
• 4 dientes de ajo picados
• 1/4 taza de aceite de oliva
• Jugo de 1/2 limón (opcional)
• Sal y pimienta al gusto

Preparación:

1. Mezclar ingredientes: En un bol, combina el perejil, el ajo y el aceite de oliva.
2. Ajustar sabor: Agrega sal, pimienta y, si deseas, el jugo de limón para darle un toque ácido.
3. Servir

La salsa provenzal es versátil y se puede usar en una variedad de platos. Aquí te dejo algunas ideas:

1. Carnes a la parrilla: Ideal para acompañar carnes como pollo, cordero o cerdo, realzando su sabor con el frescor del ajo y el perejil.

2. Pescados: Funciona muy bien con pescados a la plancha o al horno, aportando un toque aromático y fresco.

3. Verduras asadas: Se puede utilizar como aderezo para verduras asadas, como calabacines, berenjenas y pimientos, elevando su sabor.

4. Mariscos: Es excelente para acompañar mariscos, como camarones o mejillones, ofreciendo un contraste delicioso.

5. Pasta: Puede servir como salsa para pastas, mezclándose con aceite de oliva y queso parmesano para un plato ligero y sabroso.

6. Pan y bruschetta: Perfecta para untar en pan o bruschetta, creando un aperitivo fresco y aromático.

7. Ensaladas: Se puede añadir a ensaladas para darles un sabor extra, ya sea como aderezo o mezclada con los ingredientes.