Historia:

La salsa criolla tiene sus raíces en la mezcla de culturas que se produjo durante la colonización de América Latina. Se cree que surgió en la época colonial, cuando los ingredientes traídos por los colonizadores europeos se combinaron con los alimentos autóctonos de la región. El término "criollo" se refiere a personas de ascendencia europea nacidas en América Latina, y la salsa criolla refleja esta fusión de influencias.

La receta básica de la salsa criolla varía según la región y los ingredientes disponibles, pero típicamente incluye cebolla, tomate, pimiento, ajo y cilantro, todo picado finamente. A menudo se aliña con vinagre, aceite de oliva, jugo de limón y sal, lo que le da un sabor fresco y ácido.

La salsa criolla se ha convertido en un elemento básico en la cocina de varios países latinoamericanos, como Argentina, Colombia, Perú y Venezuela. Se utiliza como acompañamiento para una variedad de platos, desde carnes asadas hasta platos de mariscos y empanadas. Su versatilidad y su sabor distintivo la han convertido en una parte esencial de la gastronomía de la región, y su historia refleja la diversidad cultural y culinaria de América Latina.

Ingredientes:

• 1 cebolla morada, finamente picada
• 1 tomate, finamente picado
• 1 pimiento rojo, finamente picado
• 1 pimiento verde, finamente picado
• 2 dientes de ajo, picados
• 1/4 taza de aceite
• 1/4 taza de vinagre
• Jugo de 1 limón
• Sal y pimienta al gusto
• Perejil fresco, picado (opcional)

Desarrollo:

1. Preparar los ingredientes: Pica finamente la cebolla, el tomate, los pimientos y el ajo.
2. Mezclar: Combina todos los ingredientes picados en un tazón grande.
3. Aliñar: Añade el aceite de oliva, el vinagre y el jugo de limón. Mezcla bien.
4. Sazonar: Agrega sal y pimienta al gusto. Mezcla nuevamente.
5. Reposar: Deja reposar en el refrigerador por 30 minutos para que los sabores se integren.
6. Servir: Sirve la salsa criolla con carnes asadas, pescados, empanadas o ensaladas. 

La salsa criolla es extremadamente versátil y puede usarse para realzar el sabor de una variedad de platos. Aquí hay algunas formas comunes de usar la salsa criolla:

1. Carne Asada: Es un acompañamiento clásico para carnes asadas, como carne de res, cerdo o pollo a la parrilla.

2. Empanadas: Se utiliza como relleno o acompañamiento para empanadas, aportando frescura y sabor.

3. Pescados y Mariscos: Se sirve sobre pescados y mariscos a la parrilla o en ceviches, añadiendo un toque ácido y refrescante.

4. Arepa: Se sirve dentro de las arepas, un plato típico de Venezuela y Colombia, como un relleno sabroso.

5. Platos de Arroz y Frijoles: Se mezcla con arroz o frijoles cocidos para agregar sabor y complejidad.

6. Huevos: Se sirve sobre huevos revueltos, fritos o como parte de un desayuno típico.

7. Sandwiches: Se utiliza como condimento para sandwiches, agregando sabor y textura.

8. Ensaladas: Se sirve como aderezo para ensaladas verdes o de vegetales, añadiendo frescura y sabor.

En resumen, la salsa criolla es una adición deliciosa a una amplia variedad de platos, y su versatilidad la hace adecuada para casi cualquier comida.