El presidente de Conicet, Daniel Salamone, junto con el Jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el Secretario del CTI Alejandro Cosentino, anunciaron despidos de trabajadores administrativos en Conicet. Según ATE, se trata de aproximadamente 86 cesantías, sumándose a otras 200 desde enero.

ATE denunció en un comunicado que estos funcionarios, al seguir órdenes sin cuestionarlas, se convierten en cómplices del plan sistemático de destrucción del Estado nacional. Además, exigieron la renuncia de Salamone, argumentando que la decisión de despidos contraviene lo dispuesto por el Directorio y todos los directores de los CCT e institutos del país.

El directorio del Conicet expresó su rechazo a la decisión de limitar la renovación de contratos de personal administrativo y técnico hasta el 31 de marzo, afectando a 1.600 empleados. ATE convoca a una concentración el lunes 25 en la explanada del Polo Científico, además de una marcha contra el gobierno "negacionista" de Milei y sus aliados.

Mario Pecheny, miembro del directorio del Conicet, reveló que el plan de despidos fue rechazado por unanimidad. Según él, Salamone argumentó que cumplía órdenes de la Casa Rosada. Los directores plantearon su desacuerdo, pero la medida se llevó a cabo. Se estima que la mayoría de los despedidos eran contratados, sin oportunidad de ser incorporados como empleados de planta.

Los cesanteados, muchos de ellos con años de servicio, expresan su desánimo y preocupación por su futuro laboral. Pecheny critica la falta de respuesta por parte de la clase política y sugiere que la caída del DNU 70/2023 podría evitar situaciones similares en el futuro.

La proporción de despidos en relación con la cantidad total de empleados es significativa, especialmente considerando que el Conicet estaba por debajo del mínimo establecido por el Ministerio de Modernización en 2016. Los despidos generan incertidumbre y vulneran los derechos laborales básicos de los trabajadores afectados.