River dio el primer paso en el Mundial de Clubes con una victoria clave ante Urawa Red Diamonds por 3-1 en Seattle. El equipo dirigido por Marcelo Gallardo mostró pasajes de buen juego y supo aprovechar las oportunidades para convertir a través de Colidio, Driussi y Meza, todos de cabeza, en un partido que marcó el estreno del Millonario en el Grupo A.

Más allá de algunas imprecisiones propias del debut, el conjunto argentino cumplió con el objetivo inicial: sumar de a tres. Los goles llegaron gracias a la efectividad en la pelota parada y a centros precisos, en especial los ejecutados por Marcos Acuña, quien aportó dos asistencias claves. Facundo Colidio fue uno de los puntos altos, mostrando personalidad para asumir el protagonismo, mientras que Armani volvió a ser garantía en momentos decisivos.

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La nota preocupante fue la salida de Sebastián Driussi por lesión, una baja sensible que será evaluada en las próximas horas. El delantero, autor del segundo tanto, se retiró del estadio sin poder apoyar la pierna y se espera parte médico oficial.

El equipo japonés, por su parte, ofreció resistencia y aprovechó algunas desatenciones defensivas de River, lo que mantuvo el resultado abierto hasta el final. Sin embargo, la jerarquía individual del conjunto argentino terminó marcando la diferencia.

Con el aliento de miles de hinchas que se hicieron sentir en tierras estadounidenses, River comenzó su camino con el pie derecho. El próximo desafío será frente a Rayados de Monterrey, en Los Ángeles, en un duelo que promete mayor exigencia. Lo positivo es que, desde la victoria, habrá margen para corregir y seguir creciendo en busca del sueño mundialista.