Cristina Kirchner presentó un pedido formal para cumplir su condena de seis años de prisión en la causa Vialidad bajo la modalidad de prisión domiciliaria, sin la obligación de usar una tobillera electrónica que controle sus movimientos. La solicitud fue presentada por sus abogados, Alberto Beraldi y Ary Llernovoy, ante el Tribunal Oral Federal 2 luego de que la Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmara su condena, dejando firme la sentencia.

La defensa fundamentó la petición en tres ejes principales: el rol de Cristina Kirchner como ex presidenta que requiere medidas especiales de seguridad, el intento de homicidio que sufrió en septiembre de 2022 y su edad, ya que tiene 72 años. Respecto a la seguridad, señalaron que su función presidencial le otorgó acceso a información “de carácter secreto o bien confidencial”, por lo que debe contar con una custodia especial a cargo de la Policía Federal.

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En cuanto al ataque ocurrido el 1 de septiembre de 2022, cuando Fernando Sabag Montiel le apuntó con un arma a centímetros de su rostro, los abogados recordaron que uno de los investigados en esa causa tiene vínculos con personas que actualmente forman parte del Ministerio de Seguridad de la Nación, insinuando una posible amenaza interna. Sin mencionar nombres, la defensa hizo referencia al diputado nacional Gerardo Milman y a la ministra Patricia Bullrich.

“Resulta incontrovertible que en el caso de Cristina Fernández de Kirchner, el cumplimiento de una pena privativa de libertad sólo puede ser llevado a cabo bajo la modalidad de detención domiciliaria. Ello así, pues su alojamiento en una institución carcelaria de manera alguna es compatible con los recaudos de seguridad que deben serle garantizados a una persona que se encuentra en la situación de nuestra asistida”, expresaron los abogados en el escrito.

Además, argumentaron que las condiciones de seguridad en una cárcel implicarían para la ex presidenta un régimen de aislamiento absoluto y vigilancia permanente, medidas que serían “incompatibles con los estándares constitucionales y convencionales” que protegen a las personas privadas de libertad de tratos crueles o inhumanos.

Por otro lado, la defensa solicitó que Cristina Kirchner no utilice la tobillera electrónica, ya que cuenta con custodia policial permanente, y consideraron que ese dispositivo es “completamente innecesario”. Sin embargo, la ley de ejecución penal establece que para la prisión domiciliaria es obligatorio el uso de un dispositivo electrónico de control.

Mientras se resuelve la petición, los abogados pidieron que la ex presidenta quede detenida en su domicilio y no sea trasladada a ninguna unidad penitenciaria o dependencia policial.

Previamente, el juez del Tribunal Oral Federal 2, Jorge Gorini, ordenó que Cristina Kirchner y los otros ocho condenados se presenten en los tribunales de Comodoro Py en un plazo de cinco días hábiles para quedar detenidos. Además, solicitó a la ministra de Seguridad que asigne una dependencia federal adecuada para el alojamiento, considerando la edad de la ex mandataria, sus condiciones de seguridad y el intento de homicidio que sufrió.

La resolución final sobre la prisión domiciliaria sin tobillera electrónica será tomada por el Tribunal Oral luego de escuchar la opinión de los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, quienes ya pidieron la “inmediata detención” de Cristina Kirchner y los demás condenados.