Con una temporada turística de playas vacías, la industria en caída, sin el motor de las pymes funcionando, inversiones que no llegan y una ideología retrógrada basada en una constitución anterior a Alberdi, en un mundo en el que no encaja.

Parece no saber qué hacer cuando está frente a líderes internacionales, aferrado a su fetiche, la carterita de mano, como los niños a su peluche, mientras lo dejan solo al no poder dialogar sobre temas como la agenda 2030, los derechos humanos, y tantas miradas del mundo que aborrece y no tolera en la menor discusión.

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La modernidad, el respeto por la vida, por la diversidad, no son bien vistos por quienes hablan de libertad, pero no la practican, manteniéndose impúdicos en su lugar de pertenencia: las redes.
Hay una perversa mirada biológica frente a las Madres y Abuelas, basada en los años de ellas, creyendo que, cuando ya no estén, la lucha desaparecerá. Avanzan, de esta forma, en la disolución de las instituciones de Derechos Humanos y todo aquello que sea emblemático. Pero parece que, dentro de las juventudes reales que se movilizan, que muestran de cara y cuerpo presente sus convicciones, se defiende la memoria en contra del posible cierre del organismo ex ESMA.
Esos mismos jóvenes sostienen las discusiones sobre el abanico ideológico y lo real versus lo creado desde las plataformas.

Es que aún no hemos podido ver a un “Gordo Dan” debatir; solo pudimos observar su espectáculo horrendo, oscuro, copia berreta de la discursiva del Tercer Reich: misma escenografía, peinados, colores. Un discurso leído, mediocre y desgastado.
Es que Dan, Fijat y el resto de los libertarios de seudónimos no han leído, no parecieran tener la instrucción básica que puede dar un mínimo conocimiento de la historia o las culturas, mucho menos del avance del mundo y sus programas en este siglo.
El insulto, la denostación del otro, la imbecilidad como paradigma, es la estrategia y la condición para pertenecer.

Es que tenés que ser un cosplayer, un provocador o un devenido conservador rancio, aun sin saber qué significa, para que los hermanos Milei te miren como mínimo.
El problema real es que ellos serán los diputados y senadores del 2025 si es que la oposición no despierta.

La izquierda solo oponiéndose, mientras la rebeldía está en el odiador de ultraderecha; la dirigencia sindical impávida, inerte, temerosa ante la posibilidad de que toquen sus arcas.
El peronismo discutiendo una propia interna que no se entiende en este momento de la Argentina, pero descubre la verdadera cara de los actores que solo buscan poder.

Dentro de todo esto, el radicalismo deja de existir con los migrantes a LLA y la poca disuasión de la conducción partidaria.
Un PRO sin figuras preponderantes, con varios dirigentes como Ritondo señalados por enriquecimiento ilícito, o Santilli y sus 14 offshore, vuelcan toda su estrategia en mantener el núcleo madre: la Capital Federal.
Macri ya no tiene poder de voto, pero sí de daño, y darlo por muerto en política es realmente un error de análisis.

Entre los intendentes de provincia de Buenos Aires hay hoy mucha incertidumbre, ya sea por la disyuntiva Axel o Cristina (La Cámpora) o por el proyecto de reelección indefinida que no existe al día de hoy y que dejaría a la mayoría fuera de juego al no tener sucesores de peso.
Se asoman nuevos espacios con fusiones interesantes de apertura a cuadros dirigenciales nuevos y conocidos, con amplitud.

Se prepara el año para votar nuevamente y los encuestadores no se juegan por ningún pronóstico en la Narnia Argenta.

Carla Echichure Castro