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10 de diciembre de 2023

Chalinas al viento

“Lo que amas verdaderamente permanece, lo que amas verdaderamente no te será arrancado, lo que amas verdaderamente es tu única herencia verdadera…la hormiga es un centauro en su mundo de dragones…” escribió el poeta estadounidense Ezra Pound, en su memorable Canto LXXXI. Cecilia Corino escribe hoy sobre el instante mágico y fugaz de los momentos felices, que duran apenas una noche y en los que cobramos la certeza de habitar un lugar seguro y de ser amados para siempre.

 

Chalinas al viento

Cuatro largas mesas, a comienzos de diciembre, una sola estrella sobreviviente a las nubes de tormenta que cubrían la madrugada. Y música. Música de guitarras y de voces profundas. Copas cargadas de vino y copas vacías, y copas con cerveza u otro pecado permitido por una noche. Soplaba un viento fresco que sacudía las hojas de las enredaderas y las ligeras chalinas que la anfitriona tenía colgadas del brazo y sacudía en el aire para llamar la atención de aquellos a los que el frío había tomado desprevenidos, como a mí. La tela ligera era como una caricia reconfortante sobre la piel erizada de mis brazos.

Las guitarras llamaron a una cueca y las manos se extendieron como una invitación para la dueña de casa. Las sonrisas y las palmas la convencieron de bailar, dejándose llevar con el rostro iluminado por las luces del jardín y el frescor del viento que levantaba el cabello y la ligera chalina.

La noche duró un minuto de paz en el que no importaron las diferencias o las amargas lágrimas del año, un minuto en el que el frío fue nada y nada fue todo, un minuto que fue una eternidad en el sentimiento de estar a salvo, de ser amado, de tener un lugar seguro.

Un minuto que terminó en el siguiente, cuando llegó la hora de irse y la tela sedosa de la chalina se deslizó por mis brazos al quitármela y su caricia me dio ganas de soltar una lágrima solitaria por la paz que se esfumaba en el viento de tormenta que se parecía mucho a la vida a la que teníamos que regresar.

                                                                                                                      

CECILIA CORINO

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