TRENES QUE CUENTAN SU HISTORIA

Se trató de una completa estación de primera categoría  por sus prestaciones, donde se relevaban personal del tren y locomotoras, argentinas y chilenas. Lugar también donde las marcadas pendientes hacían que a partir de allí  se comenzara a trepar con cremallera.

Estación Zanjón Amarillo y puente sobre el Río Mendoza
que baja de los nevados de las altas cumbres. (c.1920)

Estaba entre Polvaredas y Punta de Vacas,  sirviendo  por  24  años como la estación principal de la zona, hasta que el 11 de enero de 1934 en horas de la tarde, sintiose un gran trueno en la alta cumbre, para a pocos minutos por el amplio curso del río  Mendoza apareciese un increíble murallón de barro, agua y piedras, de más de 10 m. de altura, irrumpiendo y arrasando todo a su paso, alcanzando incluso  la  propia  ciudad  de  Mendoza,  consecuencia  de haberse  fracturado  un  dique  natural  sobre  el  Río Plomo,  en glaciares de la alta cordillera.

Imagen ilustrativa del alud que sepultó y barrió con
la estación, talleres y viviendas de Zanjón Amarillo

La estación sufrió la destrucción total, de vidas, viviendas, trenes y rieles. Los rieles, además de este puntual golpe resultaron destruidos en otros varios puntos de la línea, teniendo que ver que la vía se construyó con un equivocado concepto de “economía”, corriendo ella pegada al río apenas un par de metros por sobre su nivel, cuando se tendría que haber afianzado la vía en cornisas y túneles a mayores alturas, por sobre los quince metros.

Diez años se demoró en reconstruir la vía, pero con una nueva traza y a mayor altura sobre el río reiniciándose los  servicios  en 1944. 
Luego, bajo la administración estatal  El Trasandino Argentino, dependiente del Ferrocarril Belgrano modernizó su infraestructura y reanudó sus operaciones de carga y pasajeros. 

Locomotora a vapor inglesa ‘Kitson Meyer’ con cremallera (1911-1970)
Coche Motor húngaro ‘Ganz Mavag’, potenciado para Alta Montaña. (1960-1993)

Sin embargo, a partir de 1978 el conflicto del Beagle tensó las relaciones diplomáticas entre las naciones vecinas, afectando las operaciones del ferrocarril hasta tal punto que el 21 de septiembre de 1979 se clausuró el servicio de pasajeros, sobreviviendo solo el de carga hasta 1984. Durante este año, un alud ocurrido en el lado chileno destruyó parte de la vía férrea y la decisión de ese país de no repararla, impidió la circulación de los trenes de carga, cortando la línea y la unión de los dos países.

Desde entonces el ferrocarril trasandino internacional no ha reanudado su funcionamiento y continúa paralizado, permaneciendo con algunos servicios reducidos entre Mendoza y Las Cuevas hasta 1992 con la liquidación de Ferrocarriles Argentinos donde todos los trenes de larga distancia cesaron.

Quedan para el recuerdo de su paso entre 1910 y 1984, los 74 años que el Trasandino transportó pasajeros y cargas, atrevido y desafiante de la grandiosa Cordillera Andina, mediante una geografía compleja y riesgosa, a la vez que sumergido en una alucinante belleza. 

Las ruinas de Zanjón Amarillo, a las que se sumaron
las dejadas por la destrucción gubernamental del noventa
por ciento de nuestros ferrocarriles. (foto 2020)

El clima le ganó una batalla y otra el automotor, pero no podemos aceptar que le hayan ganado aún la guerra. El ferrocarril ha alcanzado nuevas formas en el mundo y…  Los Andes y el Cristo esperan con fe su regreso!!

Francisco Álvarez

Fuentes: Archivo de El Recopilador.
Fotos tomadas de internet, créditos a quienes correspondan.
Si querés leer todo el material publicado por El Recopilador en Noticias con Enfoque hace click acá