A diferencia del empate 0-0 contra Costa Rica, donde desperdiciaron más de diez oportunidades claras ante la sólida defensa de Gustavo Alfaro, el Scratch mostró contundencia. Superó el vendaval guaraní durante la primera media hora de juego, donde Alisson Becker realizó una atajada crucial ante un potente disparo de Damián Bodabilla. Luego, Brasil encontró espacios en ataque y causó daño rápidamente.

La primera alegría pudo haber llegado de los pies de Lucas Paquetá, quien falló un penal y provocó murmullo entre los hinchas. Sin embargo, Vinicius Jr. cambió el ambiente: tras una gran jugada individual, se escabulló en el área grande y definió con precisión para el 1-0.

El crack del Real Madrid, candidato al Balón de Oro, se convirtió en una pesadilla para la defensa paraguaya. Ocho minutos después, Rodrygo se escapó por la banda izquierda, dejó atrás a Gustavo Velázquez y disparó. El arquero Rodrigo Morínigo no pudo controlar, Matías Espinoza no despejó, y Savinho aprovechó para marcar el 2-0.

Con Brasil dos goles arriba, Vinicius mostró su habilidad con lujos que calentaron el partido, provocando reacciones de Mathías Villasanti y Fabián Balbuena, quienes recibieron tarjeta amarilla. Vinicius, sin embargo, respondió con un doblete: su segundo gol llegó tras un error defensivo rival, llevando el marcador a 3-0 antes del descanso.

En la segunda mitad, Paraguay descontó con un golazo de larga distancia de Alderete, quien buscó redimirse de su error previo. Sin embargo, Alisson Becker se mantuvo firme en la portería. Cuando Paraguay parecía acercarse al 3-2, un penal a favor de Brasil, cobrado por Paquetá, sentenció el 4-1 definitivo.

Con este resultado, Brasil suma cuatro puntos y se ubica segundo en el grupo, a dos puntos de Colombia, que venció 3-0 a Costa Rica en el primer turno. Paraguay, por su parte, perdió ambos partidos y se despidió tempranamente del torneo.