Este miércoles 1 de enero de 2025, la receta electrónica comenzó a regir como el único método válido para la prescripción de medicamentos en todo el país. La implementación, enmarcada en la Ley Nacional de Recetas Electrónicas (Nº 27.553), busca optimizar la eficiencia y seguridad del sistema sanitario mediante un entorno digital que conecta a pacientes, profesionales de la salud y farmacias.

Desde el Ministerio de Salud señalaron que la medida representa un avance significativo para reforzar la trazabilidad de los tratamientos y garantizar un acceso más ágil y seguro. Según las autoridades, "la receta electrónica se convertirá en un puente digital que facilitará la interacción entre pacientes, médicos y farmacias".

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La normativa, reglamentada en julio de 2024 mediante el Decreto 345/2024, otorgó un período de adecuación de 180 días que concluyó el 31 de diciembre pasado. A partir de ahora, la prescripción en papel queda eliminada, y los medicamentos solo podrán recetarse a través de plataformas registradas en el Registro Nacional de Plataformas Digitales Sanitarias (ReNaPDiS).

Cómo funciona la receta electrónica

La nueva receta debe incluir:

• Identificación del profesional: nombre, matrícula, especialidad y domicilio.
• Identificación del paciente: nombre, DNI, fecha de nacimiento, obra social o prepaga, y sexo.
• Detalles del medicamento: nombre genérico, presentación, forma farmacéutica, cantidad de unidades, y diagnóstico.
• Fecha de emisión, código de barras, y firma digital del profesional.

Las plataformas electrónicas almacenan estas recetas en repositorios virtuales, permitiendo a las farmacias acceder a ellas para dispensar los medicamentos. Los pacientes, por su parte, solo necesitan presentar su DNI o credencial médica para retirar los tratamientos indicados.

Impacto en el sistema de salud

La receta electrónica promete agilizar los procesos, eliminar errores asociados al papel, y mejorar la trazabilidad de los tratamientos. Además, fortalece la seguridad y reduce riesgos de falsificación, mientras asegura un acceso más equitativo a los medicamentos esenciales.

Con esta nueva modalidad, la Argentina da un paso hacia la modernización de su sistema sanitario, consolidando un entorno digital más eficiente que se alinea con los estándares internacionales en salud.