Para cumplir esta meta se requirió el trabajo transversal con la empresa Aerolíneas Argentinas y el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad de la Nación, dado que en marzo pasado firmaron un convenio para el traslado en avión de personas que sufren violencias de género y sus familias, en trayectos que superen los 1.000 kilómetros.

La mujer y sus hijos fueron primero acompañados por los equipos técnicos de la Secretaría, encabezada por Liliana Hendel, y se les brindó alojamiento en un refugio que funciona en La Matanza.

En ese marco, desde el primer momento la mujer expresó su deseo de retornar a su provincia natal, donde cuenta con una red familiar.

La gestión finalmente fue exitosa y el viaje se concretó. Para el cuidado de la mujer y sus hijos, en la previa del viaje y al arribar a destino -que no se difunden para preservar su intimidad- se articuló también con el Área de Género de la Asociación de Personal Aeronáutico (APA), por lo que recibieron ayuda y acompañamiento en el trayecto.

Además, desde la Matanza se generaron puentes con los equipos técnicos de la Secretaría de Género del municipio donde retornó la mujer, como también el Ministerio de la Mujer de esa provincia, para que cuente con un seguimiento tras las situaciones de violencia extrema que padecieron.

“Desde la Secretaría hicimos lo habitual que es articular con otras áreas. Inmediatamente respondieron del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad de la Nación, así como de Aerolíneas Argentinas, dado que tienen firmado un convenio para posibilitar el traslado de mujeres en situaciones de violencia de una provincia a la otra”, destacó la secretaria Liliana Hendel, psicóloga, periodista y militante de los feminismos.

También señaló que la intervención se realizó “con la participación de las direcciones activas en estos temas de la propia Secretaría: la directora del Centro de Asistencia a la Mujer (CAM), Paula Lipera; del Área de Seguimiento de Casos Críticos, Marilina Villarejo; del Área de Comunicación Estratégica, Maximiliano Montenegro, quienes lograron que ese convenio se pusiera en marcha para generar un traslado bastante rápido, en quince días, y lograr que la mujer y sus hijos fueran recibidos por su propia familia en otra provincia”.

“Las fotos que mandaron el primer día cuando llegaron a esa provincia fueron de una profunda emoción -afirmó la funcionaria-. Y, por supuesto, como Secretaría nos aseguramos que el Área de Género de esa jurisdicción la estuviera esperando, la recibiera y acompañara en esta primera etapa que va a ser difícil pero también va a ser de un gran alivio”.

Cabe destacar que la mujer e hijos padecieron violencia física, económica y psicológica por parte del agresor y el entorno familiar de éste, en el domicilio que compartieron en La Matanza. Por esta razón, resultaba imprescindible el trabajo coordinado para actuar con rapidez y que puedan acceder al ansiado viaje.

La Secretaría agradece a los equipos de trabajo de Aerolíneas Argentinas y el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades de La Nación por la sensibilidad, la comprensión de la urgencia y por abordar satisfactoriamente la situación.