Central Córdoba de Santiago del Estero vivió este martes un capítulo inolvidable: jugó por primera vez un partido de Copa Libertadores. Lo hizo en el estadio Madre de Ciudades, con el aliento de su gente y ante un rival de peso como Liga Deportiva Universitaria de Quito. Y aunque dominó buena parte del encuentro e hizo méritos para llevarse los tres puntos, el equipo argentino debió conformarse con un empate sin goles en el inicio del Grupo C.

El equipo dirigido por Omar De Felippe fue protagonista desde el comienzo. Si bien las llegadas escasearon en los primeros minutos, el Ferroviario se mostró más decidido, con una propuesta ofensiva que buscó abrir el marcador. La gran polémica de la noche llegó a los 37 minutos del primer tiempo, cuando Luis Angulo ingresó al área y, en el intento de despejar, el ecuatoriano José Quintero tocó la pelota con la mano desde el piso. El árbitro uruguayo Leodán González fue advertido desde el VAR, revisó la jugada, pero decidió no sancionar penal. El reclamo local fue inmediato.

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En la segunda parte, Central Córdoba acentuó su dominio. Tuvo situaciones claras a través de Leonardo Heredia, Angulo y un cabezazo de José Florentín, que obligaron a intervenciones salvadoras del arquero visitante, Gonzalo Valle, quien terminó siendo la figura indiscutida del partido. Valle sostuvo a Liga de Quito con atajadas clave, pero a quince minutos del cierre debió salir lesionado, reemplazado por Brian Heras.

A pesar de la insistencia y del empuje del público, el gol nunca llegó. El empate deja un sabor agridulce en Santiago del Estero, aunque el equipo se retiró entre aplausos por la actitud y el juego mostrado en su primera experiencia continental. La próxima parada será exigente: el miércoles 9 de abril visitará a Flamengo en el mítico estadio Maracaná. En tanto, Liga de Quito será local ese mismo día ante Deportivo Táchira.